¿Conoces el proceso de botar un barco y sus riesgos?

Feb 09, 2022

Las leyes de la física son cruciales cuando hablamos de megaestructuras. Quizá te hayas preguntado alguna vez, al ver enormes buques de carga o cruceros más grandes que edificios, cómo es posible botarlos al mar.

Pues bien, el proceso se denomina "botadura" y es uno de los procedimientos más importantes de todo el proceso de construcción de barcos. Dependiendo del tipo de embarcación, podemos utilizar cuatro tipos diferentes: Botadura de tipo gravitacional, flotadura en dique seco, de tipo mecánico y de airbag. 

En cuestión de segundos, estos barcos se estabilizan en el océano y están listos para zarpar. Sin embargo, si no se aplican las leyes de la física, las consecuencias pueden ser catastróficas.

 

Los diferentes métodos de botadura de barcos

Botadura de tipo gravitacional

Pueden dividirse a su vez en tres tipos: la botadura frontal por deslizamiento sobre aceite, frontal sobre carriles de acero y la botadura de costado.

Botadura frontal por deslizamiento sobre aceite: Es una de las formas más antiguas de botar un barco. El barco se desliza en el agua sobre una vía de deslizamiento utilizando su propio peso. Se usa aceite o cera en la guía para facilitar el proceso. 

La principal ventaja es que utiliza un equipo sencillo y puede utilizarse para buques de distinto tonelaje. Sin embargo, este recubrimiento de aceite puede contaminar el agua y la enorme presión en la parte delantera del barco puede provocar un accidente. 

Botadura frontal por deslizamiento sobre carriles de acero: Como variación, este método utiliza rodillos de acero en lugar de aceite para reducir la fricción durante el deslizamiento. Este método es eficaz y fácil de usar, pero los gastos de instalación iniciales son elevados.  

Botadura lateral (o botadura de costado): Es uno de los sistemas de botadura de barcos más utilizados. Se inició en el siglo XIX y se popularizó durante la Segunda Guerra Mundial. En España, se utilizó mucho en los astilleros de Ferrol ya que, debido a las limitaciones de espacio, requiere menos espacio que la botadura frontal. Este tipo de botadura requiere que el buque tenga una gran estabilidad y son necesarios muchos cálculos y comprobaciones constantes para garantizar su éxito


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Flotadura en dique seco

La flotadura en dique seco es sencilla, muy eficaz y segura. Consiste en llenar de agua el dique seco en el que se construyó el barco. Técnicamente no es un procedimiento de botadura de barcos, pero es muy utilizado por los astilleros. 

Botadura de tipo mecánico

Se trata de un término amplio como, por ejemplo, la botadura frontal mecanizada por deslizamiento se incluye como botadura de tipo mecánico. Por eso, se puede considerar botadura de tipo mecánico aquellas que requieren de maquinaria y mecánica para botar la embarcación. La construcción y el mantenimiento son elevados, por lo que se utiliza principalmente para barcos de menor tamaño. 

Video de Walter HappyCow

Botadura con airbags

Esta es probablemente la técnica más innovadora y segura para botar barcos. Al igual que los airbags de los coches protegen nuestra cabeza de los impactos, los airbags de los barcos proporcionan apoyo al casco del buque. Están fabricados con capas de caucho reforzado de forma cilíndrica que pueden utilizarse fácilmente para barcos de todo tipo y tamaño. 

Vídeo de Lockheed Martin

Las consecuencias catastróficas de los errores de cálculo

Todos los métodos implican muchos cálculos y elementos de ajuste para que la botadura se produzca correctamente. En la puesta a flote frontal y de costado, también implica procedimientos en la estructura interna del barco como apuntalar parte de la zona de proa. 

Sin embargo, a pesar de los esfuerzos, los errores ocurren y pueden ser desastrosos. Prueba de estos errores de cálculo son las botaduras fallidas que, en algunos casos, han pasado a la historia. 

Nuestro primer ejemplo es el del HMS Albion el 21 de junio de 1898. Se conserva un fragmento de este proceso (probablemente una de las filmaciones más antiguas de botaduras), y aunque no se aprecia en el vídeo sus consecuencias, la ola creada por el HMS Albion se llevó por delante una escollera, matando a 30 personas. 

Video de BFI

Otro caso fue el del SS Principessa Jolanda. Su botadura tuvo lugar el 22 de septiembre de 1907. Tras la botadura, el barco comenzó a hundirse, inclinándose hacia babor, lo que significaba que no podía equilibrarse y enderezarse. Los esfuerzos por evitar el desastre no fueron suficientes y el barco no pudo salvarse. El presunto error estuvo en el cálculo del centro de gravedad.


Un fallo más reciente, del 29 de septiembre de 2011, implicó al SS Jiugang. El astillero decidió botar el barco de forma frontal, y una vez que lo deslizaron al agua, el barco ni siquiera flotó. Según Maritime Professional, 2,5 millones de dólares acabaron en el fondo del estanque. 

Video de VolcanicalThunder

Próximamente en Nautical Channel, el programa Wind N' Miles nos acerca al proceso de restauración de un barco y su botadura al océano. La reparación en el dique seco se hará en un tiempo récord, y nos espera mucha comedia y drama en el Bully Boat Garage con Josh Carter (Josep Pastor) y su equipo de intrépidos restauradores. ¿Tendrá éxito su botadura o acabará en la lista de errores de cálculo? ¡Mantente al día para averiguarlo! 

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