La Copa América 2024, que se celebra en las aguas de Barcelona, vivió una jornada intensa en su sexto día de competición. El equipo suizo Alinghi Red Bull Racing ha protagonizado una victoria clave, consolidando su remontada en un día donde la táctica y la precisión han sido fundamentales.
El día comenzó con vientos moderados que soplaban desde el suroeste, conocidos localmente como "garbí", oscilando entre los 10 y 15 nudos. Estas condiciones hicieron que las decisiones tácticas en la elección de velas y la capacidad de adaptación al campo de regatas fueran determinantes para el resultado.
El patrón de Alinghi Red Bull Racing, con una excelente lectura del campo y anticipación de los cambios de viento, optó por una configuración de foque J1 en el inicio de la regata, lo que les permitió mantener una buena velocidad en ceñida. La decisión de cambiar a una vela mayor cuando el viento aumentó a lo largo de la prueba fue clave para consolidar su ventaja.
La regata se definió en los tramos de ceñida, donde el equipo suizo aprovechó su superior velocidad y su capacidad para navegar cerca del límite del ángulo óptimo, en torno a los 42 grados respecto al viento. Este control preciso les permitió abrir una brecha con sus principales competidores en los primeros tramos.
En los momentos clave, la tripulación realizó maniobras impecables, especialmente en las viradas y los cambios de bordo, manteniendo la velocidad del barco y evitando pérdidas de tiempo que otros equipos no lograron minimizar. A medida que avanzaba la regata y las condiciones del viento fluctuaban, su toma de decisiones rápida les dio una clara ventaja en las empopadas, donde desplegaron su spi asimétrico para maximizar la velocidad en popa.
"Nuestro control en ceñida ha sido lo que nos ha dado la regata", señaló el táctico del equipo tras cruzar la línea de meta en primer lugar.
"En este campo tan complicado, sabíamos que la clave estaba en cada virada y en gestionar bien el cambio de presión del viento".
Este triunfo coloca a Alinghi Red Bull Racing en una mejor posición en la clasificación general. Tras un inicio de competición algo complicado, donde sufrieron con las difíciles condiciones de viento en los primeros días, el equipo ha sabido corregir errores y ajustar su táctica para aprovechar las oportunidades en esta fase crucial de la Louis Vuitton Cup.
El equipo suizo se ha mostrado sólido en su manejo del barco y en la toma de decisiones estratégicas. El grinder y el trimmer de mayor han jugado un papel fundamental, manteniendo el barco optimizado en todo momento, especialmente en los tramos donde la aceleración rápida era esencial para evitar quedar atrapados en la estela de los demás competidores.
Aún queda mucho en juego, y Alinghi Red Bull Racing no puede permitirse bajar la guardia. Con el paso a las semifinales en el horizonte, deberán continuar demostrando su habilidad para adaptarse a las condiciones cambiantes del Mediterráneo y seguir siendo eficaces tanto en la táctica como en la técnica. Cada decisión en las maniobras, desde las trasluchadas hasta la elección de las velas, será crucial para mantenerse en la lucha por el codiciado trofeo.