
La ceñida es el rumbo más cerrado al viento que puede tomar un velero sin perder potencia. Es decir, navegar de ceñida significa avanzar en una dirección lo más próxima posible al viento, normalmente entre 35º y 45º respecto a su dirección.
Navegar en ceñida exige precisión, técnica y un excelente trimado de velas. En esta posición, el barco no va directo al viento (lo cual es imposible), pero sí lo más cerca que se puede.
Para ceñir correctamente, necesitas tener en cuenta varios factores:
Aquí puedes revisar las maniobras básicas a vela para complementar tu técnica.
¿Quieres ceñir como un regatista? Estos consejos te ayudarán:
Evita estos errores frecuentes:
En competición, la ceñida es sinónimo de estrategia. El recorrido contra el viento suele ser decisivo y requiere:
Saber cuándo virar y cómo ceñir eficientemente puede marcar la diferencia en el podio.
Ceñir vela no es solo una maniobra, es una habilidad clave en la navegación a vela. Dominar la ceñida te da ventaja tanto en travesías como en regatas. Con práctica, lectura del viento y un buen trimado, tu barco se convertirá en una auténtica máquina de rendimiento al viento.